El mercado inmobiliario de vivienda de segunda mano en España, ha alcanzado nuevos máximos históricos en 2025, superando incluso los niveles de la burbuja inmobiliaria de los años 2000
EL PRECIO DE LA VIVIENDA DE SEGUNDA MANO ROMPE TODOS LOS RECORDS Y SUPERA LOS NIVELES DE LA BURBUJA INMOBILIARIA
El mercado inmobiliario de vivienda de segunda mano en España, ha alcanzado nuevos máximos históricos en 2025, superando incluso los niveles de la burbuja inmobiliaria de los años 2000. Tras más de una década de recuperación económica, el precio de los inmuebles de segunda mano ha comenzado a experimentar un crecimiento imparable aumentado especialmente en grandes ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, y en zonas como Las Rozas o Alcobendas. Asimismo, en Madrid barrios de la zona Norte como Chamberí y Salamanca, han alcanzado niveles que nunca antes se habían registrado
La oferta de vivienda sigue siendo limitada, especialmente en zonas centrales y de alta demanda. Además, el acceso a la financiación ha cambiado drásticamente: los tipos de interés son más altos, lo que frena la compra para muchos compradores, sobretodo a las familias jóvenes y de primera vivienda, que en muchos casos dependen de hipotecas, viéndose más limitados por falta de poder adquisitivo. A pesar de todo esto , el aumento de los precios en las áreas más demandadas sigue creciendo. A esto hay que sumar la disminución de la oferta de vivienda debido a la falta de suelo, burocracia y un aumento significativo de los costes de materiales.
No hay que olvidarse del teletrabajo, el cual ha cambiado las prioridades de muchos compradores que buscan ahora viviendas más amplias y con mejores instalaciones para trabajar desde casa. Este cambio en las preferencias ha generado una mayor demanda de viviendas de segunda mano, especialmente en las afueras de las grandes ciudades, lo que también ha impulsado los precios. Zonas como Las Rozas, Alcobendas o Pozuelo de Alarcón se han visto particularmente beneficiadas por este fenómeno.
.Aunque los precios de la vivienda siguen siendo altos, algunos compradores se ven obligados a reducir sus expectativas y optar por viviendas más pequeñas o en zonas más periféricas.